Miguel Rellán

 

La abeja reina, definida a grandes rasgos por la compañía como una “comedia de sentimientos” de algo más de dos horas de duración, gira alrededor de la difícil relación de una madre con su hijo, los cuales viven en la localidad inventada de Moreton in the Mold, en Costwold. Temas tan diversos como las familias disfuncionales, la cría de abejas, la astrofísica teórica, la distancia entre la realidad y lo que percibimos de ella se van trenzando en la obra con una maraña de promesas incumplidas y esperanzas fallidas. “En realidad”, apunta simplificando el director Miguel Narros, “no pasa nada, sólo que los personajes son incapaces de entenderse”.

Para Narros, se trata de una obra “muy inglesa, que ha mamado de todas las tradiciones del teatro de ese país, desde Shakespeare a los más modernos”, comenta. De hecho, hay en su desarrollo no pocos paralelismos con el Hamlet shakespeariano –empezando por el nombre del chico protagonista, Humble–, “pero también tiene un poco de Chéjov, que decía que sus personajes no hacían más que comer o cenar, pero en una cena puede destruirse una vida”, apunta.

En palabras del actor Miguel Rellán –Amanece que no es poco, ¡Ay, Carmela!, Días de cine– , “la obra habla de casi todo lo que afecta al ser humano, el amor, el miedo, las ilusiones, pero sólo plantea preguntas. Cuando baja el telón, el público se lleva un montón de preguntas, pero ninguna respuesta”, explica.

Por su parte, el joven actor Juan Díaz –conocido por su trabajo en filmes como Noviembre, La dama boba o Sexykiller– encarna al hijo de la protagonista,un astrofísico inspirado en un personaje real que se volvió loco. “Estar demasiado en tu cabeza no ayuda a conectar con las emociones”, comenta el actor. “Mi personaje tiene una insatisfacción personal y necesita hacerse preguntas todo el rato. La verdad es que me siento con este papel como un niño con un juguete enorme, estoy aprendiendo mucho de todo esto”, agrega. Completan el reparto la también veterana actriz Marta Fernández Muro, Juan Carlos Sánchez y Alba Alonso.

Aunque se trate de una obra muy inglesa, La abeja reina contiene un humor muy asequible al público español, y según Verónica Forqué “todos los personajes son profundamente reconocibles. Hicimos un ensayo general en un pueblo de Toledo con público normal, no especializado, y los espectadores se rieron mucho”.

Puesto que la mayor parte de los actores son de sobra conocidos por su trayectoria en la pantalla grande, cabe preguntarse si saldría una buena película de esta obra. “No sé cómo no la han hecho aún”, dice Forqué. “Es una historia muy bien contada y muy sólida, funcionaría en el cine”. De momento, hay una gira teatral que cumplir: Alicante, Baracaldo, Yecla, Jaén, Córdoba, Jerez, San Fernando (Cádiz) y Málaga son sus próximas fechas.

 

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